La vida cotidiana de una persona se desarrolla a lo largo del día a partir de las actividades que esta realiza. La mayoría de ellas son iguales para todos los seres humanos, como comer, dormir, ir al colegio o trabajo, y otras se relacionan a los gustos personales de cada uno.
La palabra cotidiano proviene del latín quotidiānus cuyo significado es algo que se hacer a diario. La vida cotidiana se puede dividir siguiendo las diferentes actividades que el individuo realiza. Por ejemplo el trabajo de una persona o ir al colegio en el caso de un niño. En estos lugares, los seres humanos realizan su vida cotidiana, a la cual se le puede sumar hacer un deporte, ir a tomar algo todos los días después del trabajo, entre otras actividades.
En el ámbito de la filosofía, la vida cotidiana del ser humano se crean diferentes sentidos y se aparece como segura al disminuir la duda. Es decir, al tener una vida rutinaria no hay incertidumbre. En una sociedad, una vida cotidiana logra crear tradiciones, por lo que en un país hay costumbres ya establecidas en la cultura, como hasta que hora se trabaja.
Salir de la vida cotidiana es difícil ya que un ser humano, al tener una rutina estructurada, se siente más organizado y menos ansioso. Dejar de tener estos hábitos propios de la vida cotidiana, como levantarse en cierto horario, puede desbaratar la vida de una persona, perdiendo su equilibrio. Una persona sin vida cotidiana carece de estabilidad. Por ejemplo, cuando un individuo viaja a un país extranjero, el cambio de horario afectará su vida cotidiana.
La vida cotidiana puede ser conformada, también, por hábitos de horarios en las comidas, los quehaceres de la casa, programas que se ven en los medios tanto la televisión como la radio y hasta ciertas charlas que se pueden tener en familia. En cada una de estas actividades el individuo se establece en sociedad, relacionándose con los demás.
Cada persona, al ir creciendo y cambiando de ambiente, va mutando en sus hábitos y su vida cotidiana cambia. Esta también es diferente dependiendo del lugar donde el ser humano vive. No es lo mismo la vida en la ciudad, con sus costumbres y formas de vivir, que la vida en el campo, con las zonas rurales y sus formas de trabajar. Lo mismo sucede con la vida cotidiana de una clase alta y las costumbres de una persona de clase media-baja o pobre.
No hay que confundir el término vida cotidiana con el de cotidianidad, que se define como los hábitos sociales que se crean a partir del trabajo. A partir de ahí, se puede diferenciar esta cotidianidad que cada persona tiene, la cual cambia dependiendo de si es un niño, adulto o una persona mayor.
La necesidad de estudiar la vida cotidiana
Muchos historiadores aseguran que es de gran importancia estudiar la vida cotidiana de los antepasados y de las sociedades actuales. Esto ayuda como método histórico para recolectar información sobre como era un día en la vida de un ser humano en la antigüedad. Es un trabajo muy laborioso, que puede llevar incluso largos años, pero necesario para relacionar o diferenciar las vidas de las sociedades antiguas y de las actuales.
Sinónimos de vida cotidiana
diario, hábito, rutina, frecuente, corriente
Antónimos de vida cotidiana
infrecuente