La palabra plebiscito proviene del latín plebiscitum y se refiere a la resolución que toma una población a partir de una cantidad de votos. Consiste en realizar una consulta con la cual la ciudadanía puede expresar sus ideas mediante el sufragio directo.
Se trata de una elección que comienza a partir de la propuesta de los representantes que se eligen constitucionalmente. Por lo general, las personas deben decidir por sí o por no de acuerdo a la consulta que fue planteada por la Comisión Electoral pertinente.
¿Qué es un plebiscito?
Un ejemplo que puede explicar perfectamente acerca de qué es un plebiscito es el siguiente: supongamos que una empresa quiere colocar puentes sobre un río cercano a una ciudad. Esto puede traer ventajas, porque facilita el tránsito y atraerá al turismo, sin embargo para que esto suceda, es necesario reformar toda la geografía de la región encauzando el río. Para saber si la población está de acuerdo o no con la instalación de dicho puente, es que se realiza un plebiscito. Quien esté a favor, votará por el “si” y quien esté en contra lo hará por el “no”. Al finalizar la jornada se contarán los sufragios y se hará lo que decidió la mayoría.
El plebiscito tiene su origen en Roma, pues era la denominación que se le daba a las decisiones que tomaba la plebe romana en las asambleas que allí se realizaban. Se sabe que, con el paso del tiempo, dichas decisiones tomaron cada vez una trascendencia mayor.
Tipos de plebiscitos
Existen dos tipos de plebiscitos de acuerdo a lo que los gobernantes deseen consultar con el pueblo:
- Vinculantes: en este caso, el resultado de la votación será una medida, norma, ley o regulación que deberá cumplirse en forma obligatoria.
- Consultivos: si el plebiscito es consultivo, es una forma en la que los dirigentes pueden consultar al pueblo para tomar una decisión sobre un tema determinado.
Qué diferencia existe con el referendum
Junto con el plebiscito, el referendum es una de las herramientas que también se emplean con el fin de obtener la participación ciudadana. En el caso del plebiscito, el gobernante somete a consideración del pueblo las decisiones acerca de determinados temas mientras que el referendum permite que las personas puedan aprobar o rechazar la modificación o derogación de una ley cualquiera.
Cualquier persona que sea apta para votar y esté inscrita en el padrón electoral, puede solicitar un plebiscito siempre y cuando presente una petición en la que se detalle, específicamente, cuáles son los motivos para realizar tal pedido.
Cabe destacar que dicha solicitud puede ser aprobada o rechazada por el gobernante que se encuentre en ese momento en el poder. Para esto tiene hasta 60 días para emitir su respuesta.
Ejemplo con la palabra plebiscito
“Con este plebiscito podremos derogar esta ley que ya tiene muchos años sin ser aplicada.”
Sinónimo de plebiscito
consulta, sufragio, votación, comicios
