La violencia intrafamiliar es el concepto bajo e cual se catalogan las diferentes formas de violencia que tienen lugar dentro de una familia. Puede darse de diferentes maneras, ya sea físicamente o psicológicamente. Así mismo se puede presentar de padres a hijos, o de hijos a padres; así como entre otros miembros de la familia.
La familia es considerada como la agrupación de personas que comparten lazos de sangre y habitan el mismo espacio. En términos generales se considera a la familia como un espacio de encuentro y de reunión donde los integrantes se sienten seguros, con confianza y protegidos. Sin embargo muchas veces esa estructura se desvanece y aparecen en el seno familiar conflictos diversos. Muchos de esos conflictos pueden volverse peligrosos y terminan en casos de violencia.
Este tipo de violencia puede manifestarse mediante maltrato físico, abusos sexuales, maltrato psicológico a través de insultos o vejaciones. La misma se da en cualquier tipo de familia y no solo en aquellas que viven en situaciones precarias o marginales.
Una de las causas de este tipo de violencia son los problemas económicos y la falta de ingresos. Muchas veces el hecho de que un solo miembro de la familia trabaje y el resto no, genera molestias y se puede generar incluso una especie de dominación de uno sobre otro.
La falta de educación o una mala educación, no solo en el ámbito educativo sino también en lo que se refiere a las enseñanzas dentro del mismo hogar, puede ser causa también de este problema. Muchas veces en una familia no existen valores como el respeto, la sinceridad y el afecto, lo que deriva en ambientes familiares negativos y peligrosos.
Algunas de las posibles soluciones ante este problema son: establecer vías de comunicación para que se puedan denunciar casos de violencia intrafamiliar, educar con el ejemplo para evitar trasladar a todos los miembros de la familia los problemas, apoyar desde el ámbito educativo a los hijos.
Características de la violencia intrafamiliar
Cuando la violencia es psicológica no presenta indicios claros que se puedan detectar como en el caso de la violencia física. Se trata de una violencia que busca dañar emocional y mentalmente a la otra persona. Se manifiesta con palabras hirientes, insultos, humillaciones, blasfemias, malas contestaciones.
La violencia de pareja, dentro de la familia, es un tipo de violencia muy común. Generalmente el maltrato recae sobre la mujer. Los celos, engaños y mentiras son algunas de las causas que llevan a una persona a maltratar a su pareja. La violencia de pareja afecta no solo a las dos personas que la conforman, si en el hogar hay niños pequeños o adolescentes siempre se ven afectados de algún modo.
En el caso de la violencia contra los hijos dentro de la familia es resultado, muchas veces, de frustraciones o problemas que tiene una persona adulta y lo traslada a los hijos haciéndoles daño. Este tipo de violencia puede ir desde maltrato verbal, físico hasta incluso violaciones.