La escopolamina, también conocida como burundanga o aliento del diablo, es un tipo de droga alcaloide tropánico que se encuentra en diversas plantas como la belladona, el beleño, la escopolia y el estramonio, teniendo como efectos la alucinación y síntomas como el sueño y la sumisión. Su origen data de 1880 de la mano del científico alemán Albert Ladenburg, y más adelante se fueron haciendo investigaciones hasta destacar la velocidad con la que actúa.
Se trata de una droga alucinógena extraída de plantas que se han utilizado en culturas antepasadas por sus efectos medicinales, adivinatorios o afrodisíacos, pero no fue hasta 1980 cuando se empezó a usar la escopolamina pura.
¿Quieres saber más sobre la burundanga? Una droga muy peligrosa que actualmente está a la orden del día.
Efectos en el organismo
Cuando la burundanga se activa en el organismo, lo primero que hace es incidir en el cerebro, el órgano del que salen las órdenes para el correcto funcionamiento del resto del cuerpo.
Uno de los sistemas más afectados es el pulmonar que, al tener una coordinación escasa, puede provocar una parada respiratoria, siempre y cuando la cantidad de esta droga sea muy elevada.
Por desgracia no es solo esto, también provoca la incapacidad de tomar decisiones muy difíciles, por ejemplo, correr o defenderse, ya que el SNP no sabe de qué forma actuar ante la errónea interpretación del cerebro a los estímulos que le están llegando del exterior.
Por último, cabe destacar que permanece en el torrente sanguíneo durante 30 minutos después de que se ha consumido y el rastro en la orina desaparece a las 12 horas aproximadamente. Esto lo que hace es que su actuación sea más rápida que la inhalada y los efectos lleguen antes.
Medidas preventivas
Está claro que cualquier medida es poca, pero hoy en día te recomendamos que conozcas bien los peligros que puede causar. Además, es importante seguir unas medidas preventivas:
- Controlar la bebida en todo momento, lo mejor es que esté cerrada al servirla.
- No ceder ante ninguna invitación de gente desconocida, ni tampoco bebidas ni cigarrillos.
- Dar la voz de alarma ante cualquier señal, como pueden ser los síntomas o si alguno se va con algún extraño.
- No aceptar pañuelos de otros para limpiarse la cara o la ropa manchada.
- Ante cualquier mínimo síntoma, lo mejor es acudir al hospital.
La intoxicación y la sumisión
Uno de los mayores problemas ante la burundanga es que provoca conducta sumisa.
Esta sumisión por parte de la persona intoxicada hace que siga cualquier orden que le dicten sin poner resistencia alguna, incluso puede entregar sus pertenencias y su dinero. No solo esto, el 5% de los casos que han salido a la luz han sufrido abusos o agresiones sexuales, ya que el victimario aprovecha la situación para ello.
En resumen, esta droga de sabor amarga se proporciona a las víctimas diluida en líquidos, por lo que se sumerge en bebidas dulzonas para disimular el sabor, causando así ciertos efectos en unos 30 minutos.