El trotskismo es una doctrina política que se basa principalmente en los pensamientos de León Trotski. Este último es un político soviético que vivió entre los años 1879 y 1940. Sus ideas se basaban, principalmente en el marxismo y defendían la teoría de que podía existir una revolución eterna y permanente.
El trotskismo representaba la parte heterodoxa de la política que imperaba en la Unión Soviética. Es decir que era el movimiento político que apoyaba dichas ideas. Eran lo opuesto de la doctrina de Stalin.
Características del trotskismo
Este movimiento buscaba la manera de alcanzar el proceso de la revolución para la unión Soviética. Existen diferentes documentos y libros escritos por Trotski como el “Programa de Transición” que fue una de las bases de sus ideas que más tarde se expandieron por todo el mundo.
El trotskismo basaba sus ideas en defender la rotación de cargos y buscaba acabar con la burocracia incluyendo a todo lo que tenía que ver con el comunismo en el partido.
Trotski fue el encargado de organizar la oposición de Izquierda Internacional que, hasta la llegada de Adolf Hitler al poder en 1933 hizo que estas ideas se consideraran como parte del comunismo. Después de la victoria del Nacionalsocialismo en Alemania, el trotskismo fue considerado como una idea contrarrevolucionaria .
Cuáles fueron las principales ideas impuestas por el trotskismo
El trotskismo cuenta con una serie de ideas que fueron los pilares fundamentales para lograr imponerlas alrededor del mundo. Algunas de las ideas por las que Trotski fue tan conocido como la opción de realizar planes quinquenales. También insistió en imponer que las tomas del poder siempre estuvieran en manos del proletariado.
El trotskismo en la actualidad
Las ideas del trotskismo han seguido siendo actualizadas hasta el día de hoy por lo que muchos partidos políticos se reconocen como sus seguidores. Sin embargo, cuando hay elecciones, es muy raro que obtengan un gran flujo de votos por lo que les resulta dificultoso acceder a cualquier tipo de escaño. Los países que aún hoy en día cuentan con partidos políticos con ideas trotskistas son Argentina, México y Francia. En otras naciones como en España, surgieron grupos afines a estas ideas tales como la Liga Comunista Revolucionaria que surgió en la década de 1970, el Partido Obrero Socialista Internacionalista que surgió en la década de 1980. Por otro lado, el grupo Podemos que también comparte ideas con el trotskismo.